Publicado: 04.12.2023
Para ello, hay que saber que me encanta conducir – de hecho, mucho. Sin embargo, las condiciones en Alemania son un poco diferentes. Allí hay carreteras que son lo suficientemente anchas para dos coches, tienen una mediana y que, sobre todo, no están compuestas exclusivamente de curvas de 40% de pendiente :D
Es cierto que aquí no es así en todas partes, pero tan pronto como uno se adentra un poco en las montañas (es decir, en cada senderismo), se enfrenta bastante rápido a estos problemas. Y aunque no me gusta corresponder a los estereotipos: en lo que respecta a 'actuar en la montaña', soy una chica estereotípica.
No obstante, hoy me aventuré con valentía en una agencia de alquiler de coches, firmé un contrato y pretendí que lo había entendido. Y así comenzó la batalla con mi vehículo de combate: un Renault Clio.
No sé quién tenía más miedo, si yo o el coche, pero juntos nos dirigimos hacia el oeste para ir a Cap Noir. Al principio todo estaba muy relajado, ya que solo iba en línea recta por la carretera principal (rápido hahaha, velocidad máxima 110km/h). Pero después de unos 30 minutos, comenzó un trayecto de 15km de estas curvas en el GPS:
Pero fui valiente y hasta encontré un poco de diversión al subir la montaña en primera y segunda velocidad. Y me demostré a mí misma lo que ya sabía: ¡no soy una mala conductora en absoluto!
Aún así, estaba contenta de que la caminata prevista durara solo unos 90 minutos, porque estaba agotada. Y hay que bajar, para bien o para mal :D
Aunque consistió en partes que seguramente no eran secciones certificadas por TÜV (y además estaba prohibido), la caminata fue realmente hermosa.
La vista era fantástica, vi dos erizos e incluso a una mamá pájaro alimentando a sus crías *-* ¡Qué adorable!!
El día de hoy me ha devuelto dos viejas pasiones: conducir y hacer senderismo sola :)