Publicado: 22.09.2017
21.09.
cambio de rumbo hacia el sur, sureste. se ha alcanzado el punto culminante de mi tour por las vespas.
hoy se tomará realmente el enfoque. aunque colombia está a un paso y se dice que es tan hermosa. y sobre todo - todos me cuentan que es lo más hermoso de toda sudamérica. la próxima vez, pienso. para entonces tendré la licencia de conducir clase 1 y podré manejar una vespa de 300 cc.
dejo quito y mi barrio mariscal con dos ojos llorosos. una última mirada al grupo de hombres que se ha vuelto a reunir para desayunar en mi griego de ensaladas. luego, hay que mirar hacia adelante. el tráfico es denso, el sol golpea en ángulo recto desde el cielo. viajo en camiseta y sin ropa de motociclista. imprudente - pero no quiero quedarme parado en el tráfico y nadar en el calor.
salgo de quito a pesar de las dificultades (navegador apenas legible y autos y autobuses cortando) y pronto me encuentro de nuevo en la panamericana sur.
ambato es mi destino. el navegador indica un ridículo tiempo de 3 horas de viaje. es perfecto para volver a acostumbrarme. la falta de la almohadilla de espuma se hace notar con intervalos de tiempo cada vez más cortos. tengo que ingeniármelas de alguna manera. por otro lado, también es bueno tomar un descanso cada hora.
la panamericana conduce entre las cordilleras oriental y occidental hacia el sur y es un buen canal de viento. me viene con fuerza, lo que hace que la conducción sea muy fatigante. las subidas se intensifican. la vespa indica: cambio de inyectores. encuentro una