Publicado: 15.01.2020
Llego alrededor de las 13h a Bayview, uno de los distritos del norte de Auckland, y primero voy a Manuka Bay, donde un par de pescadores están regresando y no sólo tienen lenguados en su red, ¡sino una raya!
Poco antes de la una y media estoy con Andrea y seguro que podríamos haber charlado más de una hora y media. Es especialmente divertido que en una hora descubramos que ambos somos de Hamburgo y que vienen de barrios casi vecinos: Berne y Volksdorf 😂
Me muevo a través de una maraña de autopistas con salidas tanto a la izquierda como a la derecha, encuentro una gasolinera y pago otros 80 dólares antes de llegar a Wendekreisen a las 15.45h.
Por el día que tuve que esperar en Okahune debido a la dañada dinamo, me devuelven una tarifa diaria, el hotel que necesité esa noche también será reembolsado.
El cuentakilómetros muestra ahora 631.004 kilómetros en total. 4.807 km de eso los he conducido en 26 días. 😱 No me ha parecido tanto, ya que a menudo apenas he conducido 100 km. Pero se acumula y las vistas han sido casi siempre impresionantes. Todo está bien, y mientras tanto charlo un poco más con la simpática señora de Tonga que trabaja aquí hoy. Como otro furgón que debe devolverse llega casi una hora después que yo, no quiere hacerme esperar más y llevarnos a todos juntos al aeropuerto, así que me llama un taxi, que paga Wendekreisen, y con el que estoy en el aeropuerto poco antes de las 17h.
Air China aún no está haciendo el check-in. Así que me siento un poco más afuera bajo el sol, antes de cambiarme a ropa más abrigada y ya no tener que usar pantalones cortos y camiseta por unos meses.
El check-in de Business Class en Air China es rápido, camino a la seguridad y salgo oficialmente de Nueva Zelanda a las 18.20h. Tengo la sensación de que volveré otra vez 😉. Quiero ver un kiwi en su hábitat natural, explorar un poco más el norte de la Isla del Sur y finalmente descubrir Stewart Island. Pero eso seguramente tendrá que esperar un poco. Ahora voy hacia Pekín a las 20.20h. Y ni siquiera tengo que conducir 😂. Vuelvo a recorrer algunas tiendas, que aquí son abundantes, y me siento avergonzado al recordar nuestro miserables aeropuerto de la capital, Tegel.
Pronto estaré cómodamente sentado en mi asiento. Mi compañero de asiento se muda a una fila vacía, así que tampoco tendré vecino hasta Pekín.