Publicado: 08.12.2017
En nuestro viaje en tren de Chiang Mai a Bangkok, hicimos una pequeña parada con una pernoctación en el pueblo de Lopburi. ¡Muchas gracias a Chiara y Marvin por esta gran recomendación, la diversión valió sin duda más que la pena!!!=)
La verdad es que en esta ciudad, aparte de algunos templos, no hay mucho que ver. La única atracción es el llamado "templo de los monos".
Nos pusimos en marcha y seguimos los consejos de Chiara y Marvin, llevando solo dos cámaras. Jonas usaba lentes de contacto, yo no llevaba joyas ni teléfonos ni nada. Los pequeños traviesos no son tan fáciles de manejar=)
Cuando llegamos, los monos, para nuestra sorpresa, estaban muy reservados y tímidos. Solo cuando un amable hombre se acercó a nosotros y nos dio comida en la mano, empezó el teatro de monos. Los monos se lanzaron sobre nosotros y, ¡zas!, teníamos uno en la espalda, en la cabeza y por todas partes. Fue muy divertido cuando los monos comenzaron a saltar entre nosotros, querían peinar nuestro cabello y revisar nuestros cuerpos. Un mono tiró de mi lunar porque pensaba que era comida=)
Realmente por todo el templo corrían cientos de monos de todas las tamaños, ¡y solo hicieron un gran teatro de monos!
Solo cuando la pandilla se volvía cada vez más insistente y me habían arrancado mechones de cabello, tuvimos que usar el palo que nos dio el amable hombre. Afortunadamente, no había que golpear, solo mover un poco el palo y los monos se iban.
Cuando a Jonas lo rasguñaron un poco más fuerte, nos alegramos de haber recibido la vacuna contra la rabia en su momento!! Y ahora me estoy planteando si deberíamos conseguirnos un pequeño mono como mascota en casa=)
Entonces continuamos en tren hacia Bangkok, esta vez en tercera clase. No había aire acondicionado y los asientos tampoco eran tan cómodos como en el otro tren. ¡A cambio, solo pagamos 100 baht, que son 2,50 € para dos personas!!