Sábado por la mañana llego a Pucón en autobús. Mi hostal está un poco fuera del bullicio, pero aún así es céntrico y tiene vista al volcán desde el jardín hacia el Villarica Y hasta desde mi habitación. Aquí hay principalmente personas de Francia - ¿a quién le sorprende dado el nombre del hostal: 'French Andes' :-D
Luego bajamos deslizándonos sobre el trasero o con una especie de plástico que parece una sartén. Yo lo llamaría una 'sartén de nieve'. Lo pruebo. Es increíblemente rápido y lleno de baches. En un lugar increíblemente empinado me da miedo y estiro todas mis extremidades, digo que tengo miedo y no quiero seguir. El guía, que es el más genial de todos los cool guías, viene hacia mí y dice que me levante. ¡Sí! ¿Cómo? Estoy medio pegada a la pendiente. De alguna manera logro levantarme, aunque el guía no me ayuda. Él dice descontento que ahora tengo que caminar y me quita las cosas para deslizarme con la excusa de que ya no las necesito. En el camino de descenso, hay comentarios tontos de su parte. Me desquicio y le grito que no me trate como a un niño. Finalmente se queda en silencio. Un poco montaña abajo y no tan empinado decido intentarlo de nuevo. Nuevamente sin la ayuda de ese guía, me coloco las cosas para resbalar y me uno a otro grupo que está deslizándose. Esta vez es genial y me divierto. Y así llego sana y satisfecha a la parte de abajo.
Todos nos quitamos las cosas excepto nuestras pertenencias y zapatos y caminamos el resto del camino hasta el auto a través del paisaje volcánico.
Al llegar a la agencia, nos esperan con cerveza y otras bebidas frías. Me quedo un rato con los demás, me quejo con la agencia sobre el guía, recibo un descuento y regreso bastante cansada al hostal.
ASÍ QUE: Quien siempre haya querido escalar un volcán, debería hacer este tour, es realmente emocionante estar allí arriba. Para mí, lo más importante fue luchar contra mi mente y haberlo conseguido aunque estuve a punto de rendirme. Sin duda seguiré aprovechando eso. Estoy realmente feliz de haberlo hecho sola. Cualquiera que conozca no habría aguantado mis quejas, así que solo pude quejarme conmigo misma :-D
El paisaje es impresionante, pero el paisaje en Atacama es aún más hermoso y variado para mí...
Bueno, y desafortunadamente los guías no explicaron nada, solo nos llevaron arriba y hicieron chistes tontos entre ellos.