Publicado: 15.08.2018
Ayer, mientras escribía la entrada del blog, pensé que el día había terminado, que tomábamos una cerveza y luego nos íbamos a dormir. No fue así. No solo conocimos a más holandeses y franceses, sino también a una psicóloga checa, un suizo (un tipo muy molesto :P) y un mexicano de 30 años - Jose. Jose es el tipo de persona sobre cuya vida se podría hacer una película. Después de una infancia muy dura y triste, se fue levantando desde la nada hasta convertirse en un demandado técnico/logista en el Cirque du Soleil. Nos contó historias sobre todos los lugares en los que ha estado, sus viajes, su familia, México y sobre la vida en el circo... Al final, nos fuimos a la cama hasta después de las 2 de la mañana y no fue fácil levantarnos por la mañana e ir a la escuela. Pero, por supuesto, todavía estamos muy motivados y hasta participamos en un curso de cocina 💪. En el camino a casa, paseamos por las calles de Getsemaní (el barrio alternativo junto al centro histórico) y buscamos un supermercado. Allí esperamos alrededor de media hora hasta que pudimos pagar en la caja. Los colombianos aprovechan el tiempo de espera para hacer un poco de música (de repente, un saco de arroz se convierte en una batería). Por la noche, nos reunimos en el bar del hostal con Markus, nuestro compañero de clase de 44 años, y tomamos algunas cervezas. En realidad, pensábamos que podríamos ir a la ciudad, pero después de nuestra 'acción de bailar descalzos en la calle' de ayer (al menos Cony, yo tenía zapatos... buen trabajo Barbara), no llegamos tan lejos.