Publicado: 21.07.2024
En realidad, queríamos viajar a la isla Koh S'dach, que aún es muy original y apenas visitada por turistas. Lamentablemente, además de un taxi sobrevalorado, no encontramos ninguna forma de llegar desde Kep al lugar Kiri Sakor, desde donde se puede tomar un ferry hacia Koh S'dach.
Como alternativa, teníamos las islas Koh Rong y Koh Rong Sanloem para elegir. Dado que Koh Rong parece atraer principalmente a turistas en busca de fiesta, elegimos la isla Koh Rong Sanloem. En Koh Rong Sanloem, hasta ahora solo hay un 'gran' lugar llamado M'Pai Bay, que incluso cuenta con calles asfaltadas; además, en algunas calas hay varios resorts. Estos resorts solo se pueden alcanzar en ferry o a pie a través de uno de los senderos. El resto de la isla está cubierto de jungla.
Según los habitantes, en Koh Rong Sanloem, durante la temporada de lluvias, alternan 7 días de sol y 7 días de lluvia. Casualidad, llegamos justo en los últimos días de la semana soleada, tuvimos sol puro el día de llegada y el día 1, el día 2 fue soleado durante el día y por la noche hubo una ligera lluvia, y el día 3 también brilló el sol durante el día, pero por la noche comenzó a llover y no paró hasta nuestra salida a la mañana siguiente.
Mientras Markus estuvo buceando y haciendo esnórquel varias veces durante los tres días en Koh Rong Sanloem y chillando en el Beach House y participando en noches de cine, yo hice mi certificación de buceo de aguas abiertas. Mi rutina diaria era: levantarme, desayunar, bucear, almorzar, bucear, estudiar teoría, dormir. Tuve mucha suerte con los habitantes del mar: vi un gran pez globo, una de las tortugas extremadamente raras que hay allí y un mantarraya. En vez de huir, la mantarraya incluso nadó varias vueltas alrededor de mi instructor y de mí - ¡fue genial!
Nos hospedamos con varios compañeros animales en el bungalow de la escuela de buceo: debido al peligro de inundación, los bungalows están construidos sobre pilares, y a través de las rendijas en las tablas de madera del suelo pudimos ver (y también escuchar y oler) a las gallinas del dueño de la escuela de buceo. Además, teníamos muchos mosquitos, una araña que era del tamaño de mi palma, y un gecko de 30 cm. ¡Bienvenidos a la jungla!