Publicado: 02.06.2019
¿Cómo? ¿Ya se acabó? Hoy, de hecho, es ya hora de volver al valle. ¡Pero no sin llevarnos la cumbre justo frente a la Schlernhaus y escalarla antes del desayuno! Como recompensa por levantarse temprano, el amanecer se incluye de inmediato. Después, nos ponemos la mochila y comenzamos a caminar. Está nublado. Y bajar es de alguna manera agotador. Bueno, al caminar hacia arriba también se queja uno todo el tiempo, pero bajar aún es peor. Me compadezco especialmente de todas las personas que nos vienen encontrando desde el valle. ¡Si supieran lo que les espera! De regreso en Bolzano, tomamos nuestra hospedaje, una bonita villa muy cerca del centro. Y luego toca descansar hasta que el tren a casa sale al día siguiente: ¡Descansar! ¡Comer! ¡Ducharse! ¡Dormir! ¡Lujo! ¡Fue hermoso :-).