Publicado: 14.07.2022
Por la mañana, la aventura continuó hacia Hamburgo.
Teníamos un pequeño camping a aproximadamente 20 minutos (en transporte público) del centro. Gracias al billete de 9€ podemos viajar en tren tanto como queramos, sin preocupaciones.
El primer día fuimos al puerto, incluyendo bocadillos de pescado. En el bar Störtebeker disfrutamos de la hermosa vista. Por supuesto, no podía faltar un pequeño recorrido por St. Pauli y la Reeperbahn.
En el segundo día, visitamos el Miniatur Wunderland en Speicherstadt. Afortunadamente, no estaba tan lleno y pudimos entrar sin tiempo de espera. Para reponernos, después disfrutamos de un delicioso Franzbrötchen, entre otras cosas. Por la tarde, fuimos a Daniel Wischer y nos deleitamos con la cena allí.
Después de un día y medio de turismo, una pequeña sesión de compras era casi obligatoria. Así que nos dirigimos al centro de la ciudad y también encontramos lo que buscábamos.
El último día antes de nuestra partida lo pasamos paseando un poco por la ciudad. Durante ello, tuvimos un breve vistazo al Gängeviertel.