Publicado: 12.07.2022
Después de recoger a nuestro fiel compañero Büyü y tras haber recorrido ya dos horas de autopista, recibimos una llamada diciendo que falta la llave de la puerta de casa. Tuvimos que volver medio camino y completar con éxito la entrega de la llave.
Esa noche llegamos al camping en Heidelberg y queríamos hacer pancakes. Gracias a dos amables vecinos, también pudimos llevar a cabo esta misión con éxito.
Para cerrar el día, hicimos una pequeña caminata hacia la cervecería, tres (quizás cuatro) caminos de grava más adelante.