Publicado: 07.04.2024
Ayer, Leon y yo caminamos hasta el Cabo da Roca, el punto más occidental de Europa. Después de tres largas semanas que pasé en casa con dolor de espalda, fue un verdadero alivio salir y estar en la naturaleza.
La caminata fue de solo 12 km, pero realmente fue intensa. Siempre seguimos la costa, a través de empinados valles y sobre amplios campos llenos de arbustos florecientes y cubresuelos. A veces caminamos por las crestas de las montañas y otras veces sobre las rocas justo al lado del agua. Estuvimos completamente solos en el camino y en algunas ocasiones nos perdimos... ¡Estoy muy feliz de estar lo suficientemente en forma para hacer recorridos exigentes!
Hoy pasamos el día en la playa para recuperarnos de las penurias :-)