Publicado: 03.10.2017
Día 1: 7:30 AM 14 grados
Aún está oscuro en León, solo los murciélagos en los árboles a lo largo del paseo del río nos desean un buen viaje con su fuerte chirrido.
Nos estamos acercando lentamente al final de la ciudad. En todas partes se encuentra la concha de Santiago, flechas amarillas o señales que nos indican el camino. Por supuesto, también cada 5 metros uno o dos peregrinos, cargados con sus mochilas.
De alguna manera, en algún lugar, perdemos el camino oficial del Camino Francés y caminamos a lo largo de la autopista, completamente solos. Relajante.
Después de aproximadamente 18 kilómetros no puedo más y necesito un descanso. Así que hay un café con leche para mí y un café solo para Kay. Durante la breve pausa en el baño hay una gran confusión, algo dice en la puerta Señora y Caballero... Afortunadamente, un amable anciano en el mostrador me ayudó. Después me doy cuenta de que A es para mujer, O es para hombre. Bien alimentados, nos dirigimos a los últimos 6 km. La primera mitad pasa volando, pero después Kay me ayuda y carga mi mochila. Mi espalda ya duele. Ay. Espero que mejore :)
1:30 PM. Finalmente llegamos al albergue de peregrinos. Hay aproximadamente 30 camas en una habitación... Esto va a ser divertido, ¡espero que nadie ronque! Hoy nos damos un capricho con pasta y salsa de tomate, la mejor comida que hay... ¡Después de 2 días de pan con salami! Sin embargo, cocinar requiere un poco de valentía, ya que las cocinas de los albergues son asquerosas y sucias. Pero estamos contentos con nuestra pasta. ¡Yuhuuu!