Publicado: 30.08.2016
Tras 8 horas de vuelo, llegamos bastante cansados al aeropuerto de Londres Gatwick. Eran aquí las 10:20 a.m. hora local y pasamos por el procedimiento de control de pasaportes y recogida de equipaje. Luego buscamos la estación de tren, ya que yo había encontrado una conexión hacia Londres Blackfriars. Después de perderme varias veces con las maletas, la encontramos en la Terminal Sur. Allí nos esperaba una multitud de gente y una larga cola en la taquilla de boletos. Sin embargo, avanzamos bastante rápido y compramos un boleto fuera de las horas pico por 17 libras para los 4. Después de aproximadamente 50 minutos de viaje, llegamos a la estación, tomamos un café para reponer fuerzas y, tras unos 15 minutos de caminata (más pérdidas), llegamos al ZHotel (Fleetstreet). Aquí teníamos una habitación familiar y nos duchamos primero todos. Luego una siesta (aprox. 1,5 h) - estábamos todos muertos de cansancio y luego quise salir. Hacía muy buen tiempo veraniego y la vida bulliciosa afuera. Anne y yo salimos del hotel y nos dirigimos a Covent Garden. El hotel está realmente muy céntrico y se puede explorar todo a pie. Había mucha gente en Covent Garden y disfrutamos del bullicio de la ciudad con buen tiempo. Luego fuimos también al Támesis. Alrededor de las 18:00 volvimos al hotel y disfrutamos del paquete gratuito de queso y vino que ofrecían en el restaurante. Aquí podías servirse tanto como quisieras de 5 tipos diferentes de quesos, además teníamos aceitunas, varias salsas, pan y chocolate. También se podía elegir el vino y beber tanto como se quisiera. Todo delicioso. Para los niños había cola para beber.
Como a Marie le apetecía pizza, decidimos salir de nuevo por la noche, atravesando la ciudad - y las calles de los teatros, y encontramos un agradable restaurante italiano Zizzi, donde pudimos sentarnos afuera con temperaturas agradables. Había mucha actividad en las calles y fue muy interesante observar a la gente, con buen vino, pizza y un plato de antipasti.
Alrededor de las 10:30 nos fuimos a la cama. Como era de esperar, todos despertamos en medio de la noche y nos dormimos por la mañana.
El domingo disfrutamos primero de un delicioso desayuno en el café contiguo. A las 11:00 hicimos el check-out, pero pudimos dejar las maletas en el hotel. Luego, con un hermoso sol, cruzamos Trafalgar Square, Green Park hacia Hyde Park. Allí visitamos Speakers Corner, caminamos por Oxford Street, Soho, de regreso en dirección a Covent Garden. El domingo al mediodía también había mucha actividad aquí. Nos reabastecimos en un delicioso café italiano y recogimos nuestro equipaje. Después de un corto paseo a la estación de Blackfriars, nos dirigimos al aeropuerto de Gatwick, donde volamos de regreso a casa por la noche.
Por un lado, estábamos emocionados de volver a casa, pero por otro lado, estábamos tristes de que las vacaciones hubieran terminado. En general, fue un tiempo muy bonito, con experiencias geniales y gente agradable.