Publicado: 20.03.2023
Por lo demás, se trata de relajarse y dejar que la orilla del Nilo pase a nuestro lado.
Salgo a la cubierta y contemplo el paisaje verde y fértil que pasa. De vez en cuando un tren nos adelanta, las vías parecen seguir el curso del Nilo. Es mucho más rápido, pero en el barco se disfruta mucho más.
No llegamos a Edfu hasta la tarde. Allí vamos caminando al templo de Kom Ombo, un templo doble, en el que se adoraban a dos dioses (Sobek, el dios con cabeza de cocodrilo, y Horus). El templo ha sido bastante afectado por las inundaciones, ya que está ubicado justo en la orilla del Nilo. En los últimos 70 años ha sido restaurado, pero ahora son las multitudes de turistas las que sufren el templo. Al parecer ahora el templo se llama 'víctima del crucero por el Nilo', ya que se encuentra en la ruta del Nilo para los barcos turísticos. Así que lamentablemente, nosotros también pertenecemos a los langostas que asaltan el templo.
Un corto paseo desde el barco y ya hemos llegado - Hoda nos cuenta sobre el templo. De alguna manera he olvidado gran parte de ello. Tan pronto como uno comienza a relajarse, se vuelve lento, incluso en la cabeza... Pero probablemente también se deba a que ahora todos en el grupo están enfermos y se escucha una tos constante, estornudos y sonados (y Hoda ya no habla). Me recuerda al cuento corto de Kishon sobre el concierto de tos durante el concierto. En mi memoria, queda especialmente una imagen que muestra diferentes herramientas médicas y una lista de para qué se necesitan.
Dejemos que sea suficiente por hoy y a la cama temprano.