Publicado: 22.11.2024
La semana pasada tuvo, como siempre, momentos muy positivos pero también negativos. Las experiencias más hermosas fueron definitivamente saltar y nadar en las cascadas de Kaiate, jugar al bowling juntos, surfear al atardecer y jugar al voleibol en el campamento. Especialmente hermoso e impresionante fue el amanecer de luna llena sobre el mar.
En el campamento, nosotros (Theo, Laura, Lotta y yo) al igual que los demás, jugamos muchas cartas y entre otras cosas, Theo y yo conseguimos comprar los ingredientes para un crumble de mango con fresas y helado. Por la noche, los cuatro vimos Harry Potter en la furgoneta de los dos, personas muy simpáticas y encantadoras que están dispuestas a hacer de todo.
Entre tanto, Theo y yo nos despedimos del grupo, ya que queríamos un trabajo en la granja de fresas. Esto aún no se ha concretado tras la entrevista, pero el domingo recibiremos más información. Debido a la cancelación anticipada, regresamos al campamento para enfrentar juntos la cosecha de kiwis (Job de kiwis fase 3). Es extremadamente frustrante y nuevamente un poco desalentador tener que hacer lo mismo. Por lo que especialmente yo volví a alcanzar un bajón, resultado de la nostalgia por nuestro propio hogar, familia y amigos, así como las agotadoras jornadas laborales de 10 horas y la vida en el campamento.
Afortunadamente, esto se puede manejar ya que estoy rodeado de personas muy queridas y geniales. Así que no me siento solo y me siento mucho más seguro. Sin embargo, me cuesta disfrutar de este tiempo, ya que hasta ahora he ganado poco dinero y a través de todos los problemas (neumáticos pinchados, picadura de abeja, robo de traje de neopreno,…) siento que estoy estancado.
El fin de semana tenemos libre, es decir, hoy es día de reparación de coches y playa. Aunque el clima es más bien regular. ¡Espero que puedan disfrutar de la primera nieve en Dresde, un cariñoso saludo a todos!