Publicado: 09.07.2016
Después de que ayer se hizo tan tarde, realmente necesitábamos un pequeño descanso. Sin prisas, relajándonos, tirados junto a la piscina... Hoy ha sido (¿en sentido figurado?) el día más caluroso. Nuestra habitación no tiene aire acondicionado, así que después del desayuno obligatorio apenas logramos llegar a la piscina. Agotados, nos entregamos al día. Por la noche estábamos tan hambrientos que decidimos volver al centro de la ciudad de Bérgamo. Comimos todo lo que nos cayó en las manos, completamente hambrientos. Al final, un poco excesivos.....