Publicado: 08.09.2023
Así que, queridos, hoy comenzó el viaje. Me levanté a la 1:30, fui al aeropuerto y el vuelo salió a las 6:00. A las 23:00 de nuestra hora, llegué a Lima. No se puede decir mucho hoy. Fue solo un día en el aeropuerto y en el avión.
Lo que realmente me llamó la atención es que estaba muy tranquilo. Cosas que normalmente me harían salir de mis casillas, me dejaron indiferente. Cosas como los pasajeros que empujan, el personal grosero o las eternas esperas en la salida. Simplemente, estaba completamente relajado. La duración del vuelo fue bastante problemática. No pude ver tantas películas como quería. A veces, me quedé dormido. Espero no haber roncado. Pero el vuelo fue bastante agradable. Al llegar a Lima, por supuesto, me dejé convencer por un taxista. Fue bastante gracioso, salí del aeropuerto y sabía que ahí estaban. Aquellos que quieren sacar tu dinero. ¿Qué puedo decir? El primero hizo contacto visual. Justo frente a mí había un policía extremadamente serio. Lo miro y sacudo ligeramente la cabeza. Más o menos... no es lo adecuado. Y él sacude ligeramente la cabeza y mira con sus ojos hacia la izquierda, sin mover la cabeza ni un centímetro. Como... debo mirar hacia atrás. :) Lo hice, pero no avancé mucho. Justo a la vuelta de la esquina, uno me atrapó. Y me llevó a la habitación por un precio bastante elevado. Sabía que era mejor, pero lamentablemente estaba tan cansado que me dejé convencer. Reservé el alojamiento a través de Airbnb... Por supuesto, Superhorst... debería estar muy cerca del aeropuerto, porque mañana continuamos. Lo que no sabía es que elegí el barrio más peligroso. Eso también me lo comunicó mi caro taxista. La habitación es bonita y limpia y el baño también. La gente es muy amable y servicial. Así que ahora, la señora Ines no sale más y se va directamente a la cama :)). Estoy emocionada por mañana. Oh, y como pueden ver en las fotos, no viajo sola. Permítanme presentarles a Peter y Olaf. Como diría mi compañero de deportes... Estás un poco loco. Eso parece cierto, soy un confesado amante del chisme. :)