De muchas personas que ya han visitado París, siempre escucho que es una ciudad sucia. Sin embargo, yo fui convencido de lo contrario.
Estuvimos en París en diciembre de 2015, viajamos en avión, lo cual fue muy cómodo y no hubo complicaciones ni inconvenientes. Una vez llegamos, nos dirigimos a nuestro hotel, que era el Hotel Mercure París Montmartre Sacre Coeur. Tomamos el metro hacia el hotel, lo que nos tomó aproximadamente 15 minutos. Aunque el hotel no parecía impresionante desde afuera, por dentro era realmente muy bonito. La entrada del hotel estaba muy acogedora y decorada con calidez. Nuestra habitación también era muy bonita y no teníamos queja alguna. En resumen, nos sentimos muy a gusto en este hotel y el desayuno también estaba delicioso y era suficiente.