Publicado: 29.07.2018
Al día siguiente, un minibús debía recogerme alrededor de las 11:00 y llevarme a Kuta en aproximadamente 2 horas y media. Desafortunadamente, tuve que esperar una hora completa, pero al final todo salió bien.
Nos dejaron en el centro de Kuta y compartí un Grab hacia el hotel con 2 chicas más que también iban en mi dirección. Allí conocí a Xenia, que ya había hecho el check-in, estábamos muy felices de vernos de nuevo y poder pasar los últimos dos días juntas.
La primera noche fue relativamente relajada y recorrimos un poco la ciudad y el centro comercial y salimos a cenar.
El siguiente y último día, desafortunadamente, fue todo menos relajado y nuevamente total caos por parte de ambas.
Temprano en la mañana, llevamos la ropa de Xenia, ya que quería lavar su ropa antes de ir a Australia. Debíamos recoger la ropa a las 20:00 horas.
Después, fuimos a enviar correo, dimos un pequeño paseo y alrededor del mediodía nos dirigimos a la playa. 🏖️ Después de estar un rato bajo el sol, reservamos de forma espontánea 2 horas de surf, ya que las olas estaban increíbles. Todo salió bien, excepto por una enorme ola que me arrastró y me llenó de agua. Después de eso, tuve que tomar un descanso porque también me dolía un poco el oído. Pero tras 10 minutos volví a la tabla y logré ponerme de pie en casi cada intento y podía incluso dirigir un poco :)
Después de esa pequeña sesión de surf, fuimos al centro comercial cercano porque queríamos hacernos unos masajes en los pies. Sin embargo, eso tomó tanto tiempo que terminamos alrededor de las 7:30. Llamamos a un taxi, pero no contábamos con que las calles estarían tan abarrotadas a esa hora... después de 15 minutos en el tráfico detenido, estábamos muy frustradas, ya que Xenia necesitaba su ropa, la lavandería solo estaba abierta hasta las 20:00 y el vuelo salía a la 1:15 de la madrugada... Así que decidimos bajarnos y pedir un moto-taxi, que por suerte circulaban por todas partes. El chofer nos llevó sin dudar, ambos en su asiento trasero, y se abrió camino a toda velocidad a través del tráfico atascado. En un momento pensé que mi última hora había llegado 😄
Alividad de que aún estábamos vivas, llegamos a la lavandería, ¡pero ya estaba cerrada! No obstante, logramos contactar a la mujer por teléfono, quien volvió especialmente... Así que todo salió bien y Xenia recuperó su ropa, pero estábamos agotadas 😄
No nos quedó mucho tiempo y juntamos nuestras cosas, comimos algo rápidamente y luego nos dirigimos al aeropuerto. Curiosamente, nuestros vuelos salían casi al mismo tiempo, el de Xenia a Cairns a la 1:15 y el mío a Bangkok a la 1:35. Nuestros aviones incluso estaban uno al lado del otro al abordar :)
Después de un mes en Bali, ahora tenía que despedirme de esta maravillosa isla. Pero la emoción de volver a ver a Bangkok y a Robin era inmensa.
✈️🌃🌏