Publicado: 14.05.2017
Queridos,
Los primeros 2 días han pasado... han sido días llenos de encuentros y experiencias increíbles, pero también de algunas dificultades.
Los vuelos de Berlín a Londres y luego a Biarritz los soporté bastante bien. Aunque Londres fue bastante confuso :D. Todo transcurrió de manera automática... El control de pasaportes fue solo un escáner sin más personas y yo también tuve que pesar mi mochila y colocar la etiqueta del vuelo.
Curiosamente, en ambos vuelos me senté al lado de la misma joven. Lamentablemente, solo comenzamos a hablar en el segundo vuelo. Sin embargo, resultó que ella también está caminando el Camino de Santiago. Fue genial, nos entendimos muy bien desde el principio y estuvimos charlando todo el tiempo. Lamentablemente, nuestros caminos se separaron en Saint Jean Pied de Port después de la corta visita a la oficina de peregrinos, ya que ella ya había reservado una habitación relativamente cara en un hotel. Sin embargo, yo todavía tenía que buscar una cama. Así que caminé por las hermosas calles de SJPDP y vi a una dama colgando un cartel que decía que tenía una habitación libre. Y así fue como tuve una noche increíble, hermosa y asombrosa. En total éramos 20 peregrinos. Entre ellos varios de EE.UU, y uno de Suecia, Canadá, Australia, Corea del Sur, Brasil, 4 hermanas de Francia y yo, la única alemana :)
Para la cena, todos nos sentamos en un pequeño y muy acogedor patio trasero. Primero se presentaron las dos encargadas de la albergue y nos ofrecieron un pequeño aperitivo. Estas dos nos guiaron a lo largo de la noche de una manera increíble. ¡Fue tan maravilloso! Nos reímos mucho y nos conocimos unos a otros. Una propietaria de una granja de EE.UU, una fundadora de una organización sin fines de lucro...
¡Fue realmente una noche increíble!
Y hoy, entonces, me embarqué en la difícil etapa de casi 30 km con 1200 metros de altitud.
Ahora mismo estoy en la cama de peregrino, que es bastante cómoda, y mis piernas y hombros ya me duelen bastante. Fue bastante agotador, pero hasta ahora lo he manejado bien. Y en realidad, me gustaría escribir mucho más, pero me están cerrando los ojos... Espero poder contarles mañana sobre Peter de Vancouver y Richard de Irlanda.
¡Un gran abrazo!
Nicole