Publicado: 17.08.2016
El día 12 incluyó un extenso paseo por Tokio. Comenzamos en los Jardines Hamarikyu, que se encuentran en medio de numerosos rascacielos. Allí tuvimos la oportunidad de disfrutar de té verde tradicional en una hermosa casa de té. La ceremonia del té también implica admirar intensamente el tazón de té, que debes girar en el sentido de las agujas del reloj.
Luego nos dirigimos al distrito de Shibuya, famoso por su icónica intersección. Además, allí se encuentra la estatua de Hachiko, que fue erigida en honor a un perro que esperó en la estación durante años tras la muerte de su dueño.
Tras un breve paseo por las tiendas, fuimos al barrio de moda de Harajuku. Allí recorrimos las boutiques, cuyos precios eran bajos y las prendas bastante pequeñas.
Después nos dirigimos al Santuario Meiji, donde, junto a numerosos barriles de sake que estaban allí para ser bendecidos, también había numerosos barriles de vino francés noble, que eran un regalo de reconciliación de Francia.
Desde el Santuario Meiji, nos trasladamos al Ayuntamiento de Tokio, el Edificio del Gobierno Metropolitano. Desde el último piso se puede ver la ciudad a 202 m de altura. Edificios hasta donde alcanza la vista.