Publicado: 20.08.2016
Este jueves tomé el Shinkansen y viajé casi 3 horas a Osaka. Desde la estación fui a Namba, una enorme estación de metro en el centro de Osaka. Allí estaba mi hostel, ubicado entre varios Lovehotels, donde se podían reservar habitaciones por horas ;). El hostel era muy tranquilo y limpio, sorprendentemente no logré encontrarme realmente con nadie, a pesar de estar en un dormitorio de 8 camas.
Para el resto del día, me propuse visitar un santuario. En el camino, caminé 2 km a través de la estación de metro, que parecía extenderse infinitamente bajo la ciudad. Al llegar al santuario, me di cuenta de que llegué de nuevo demasiado tarde. Esta vez, fui escoltado personalmente por el guardián del santuario.
Una razón para mi llegada tarde fue la búsqueda de la oficina de turismo en Namba, donde quería adquirir el Amazing Pass para el día siguiente.
Después de un corto paseo por la calle de entretenimiento Dotonbori, regresé al hostel.