Publicado: 20.01.2018
Ayer finalmente llegó el día. Después de muchos días festivos, semanas de preparación y algún que otro cabello gris por el estrés, me dirigí al aeropuerto de Hamburgo y así comenzaba la parte más difícil de mi viaje:
Despedirme de mis seres queridos...
Para celebrar el día, recibí un ascenso gratuito a clase ejecutiva en Ámsterdam.
En los próximos días, los llevaré conmigo en un recorrido por mi primer destino, la Ciudad de México y sus alrededores.
Hasta entonces,
su Lariiiii