Publicado: 29.04.2022
San Cristóbal fue genial. Tuvimos (nuevamente) mucha buena comida (restaurantes veganos de helados), visitamos el enorme mercado, vimos un desfile de Semana Santa, nos encontramos de nuevo con Vinnie y visitamos el museo Na Bolom, establecido por una pareja suiza/danesa en la primera mitad del siglo XX que dedicó sus vidas a la preservación de la cultura indígena. Adjunto a ese museo había un enorme jardín salvaje, y se sentía como el paraíso.