Vladivostok se traduce como "domina el este". Durante la época soviética, Vladivostok se convirtió en la base principal de la flota del Pacífico rusa y, como resultado, fue una "ciudad cerrada". Los extranjeros no podían visitar la ciudad hasta la década de 1990.
La estación de tren fue restaurada con mucho cariño en la década de 1990