Publicado: 25.01.2019
El 1 de enero estuve con Leonie y sus padres en la noche en St. Kilda, que está a unos 20 minutos en autobús de Brighton. Allí primero caminamos un poco por el malecón y luego nos dirigimos al muelle para ver a los pingüinos que viven allí. Esa noche había mucha gente y ya temíamos que no veríamos ningún pingüino, pero por suerte valió la pena y vimos al menos 2 pingüinos pequeños. Los pingüinos viven justo en el mar entre grandes rocas. En el camino de regreso del muelle, me encontré con mis vecinos de Alemania. Sabía que estaban allí, pero no habíamos concretado un lugar o una hora para esa noche y ya casi tenía la sensación de que no los volvería a ver esa noche, debido a la gran multitud. Realmente fue una sensación extraña pero también divertida ver a los vecinos en Australia.
Los próximos días fueron bastante aburridos para mí, ya que Leonie y sus padres volaron al Ayers Rock y luego a Sydney, y también mi familia anfitriona estaba de vacaciones, así que estuve solo en casa, bueno, casi. Durante el tiempo que mi familia anfitriona no estaba en casa, una familia amiga vivió conmigo en la casa durante una semana. En ese tiempo cuidé de Millie y di muchas largas caminatas a la playa. En realidad, debería haber llegado el 04.01. a la casa de mi familia anfitriona en Portsea, donde estaban de vacaciones, pero finalmente fui allí el 09.01. con mi padre anfitrión.