Publicado: 03.07.2019
Huacachina es una pequeña oásis en medio del desierto. No hay mucho que hacer aquí, excepto conducir un buggy por el desierto y deslizarse por las dunas con una tabla de arena, lo cual fue muy divertido. Conducir el buggy me recordó un poco a una montaña rusa cuando descendíamos por las dunas. Desafortunadamente, el sandboarding no fue como esperaba; no me pude poner de pie, sino que bajé cabeza abajo por la empinada duna.