Publicado: 16.04.2023
Para continuar mi viaje hacia el lugar Beitou, con sus aguas termales, ya era demasiado tarde después de visitar el Museo Nacional del Palacio. Así que decidí escalar una vez más las escaleras del Elefant-Mountain-Trail y ver la puesta de sol sobre Taipéi.
Fue agotador, pero realmente valió la pena el ascenso.
El camino de regreso pasó por un túnel luminoso, climatizado y bien decorado, y un sendero cuyo suelo brillaba como un cielo estrellado a la luz de las farolas. 🥹
Debo disculparme por las muchas imágenes del Taipei 101, me costó elegir y el camino hacia el mirador consistía en muchas, muchas escaleras. El esfuerzo, después de todo, también debería valer la pena. 😅