Publicado: 17.04.2019
¿Dónde comienza uno a pasear por la ciudad en la Semana Santa? En Sucre, en el muy cuidado cementerio. Los ricos podían y pueden permitirse un entierro: presidentes, generales y propietarios de minas o tierras grandes. Otros vienen con la obligación de ser enterrados en ataúdes en nichos en filas interminables con cinco niveles usualmente por diez años, que pueden extenderse por diez años más.
En el mercado se ofrecen los más diversos alimentos en diferentes áreas. Todos están decorados con mucho cariño. La venta parecía ser bastante moderada por la mañana temprano.
Seguidamente, vamos a la “Casa de Libertad”, donde se firmó la declaración de independencia y se exhibe como facsímil en el lugar histórico.
En la Recoleta visitamos en el convento de los franciscanos cinco jardines y un (supuestamente de 500 años) cedro. Luego nos espera el museo textil, que ofrece una valiosa visión de la historia cultural. Un punto culminante es la exhibición de hallazgos de los restos de un grupo de siete personas de una caravana de la época preincaica (aproximadamente del siglo V después de Cristo) con objetos valiosos y bien conservados.