aus_trail_ia
aus_trail_ia
vakantio.de/aus_trail_ia

Parada en Singapur

Publicado: 28.04.2019

Los primeros hermosos días de mi viaje ya han pasado y ya he vivido muchas cosas desde que salí el lunes. En resumen, esto fue más o menos así: Vuelo desde Zúrich a Singapur, dos noches y dos días de estadía, continuación del viaje a Perth.
Pero, por supuesto, durante este tiempo he vivido, visto y probado mucho. No hay mucho que decir sobre los vuelos, los coloridos uniformes de las asistentes de vuelo son realmente bonitos, el avión A380 imponente y tranquilo en el aire.
Singapur, en cambio, me dejó algunas impresiones calurosas, por supuesto, debido al clima, pero también por los enormes edificios con construcciones increíblemente imaginativas. En Singapur, me sentí un poco fuera de lugar, inusitadamente poco atlético, por la tarde. Ya que tenía que tener cuidado con un sinfín de corredores en medio de la ciudad para no ser atropellado, no pude evitar sonreír... Porque, ¿quién de ustedes ha visto decenas de corredores en una gran ciudad? Si soy sincero, nunca había visto a un chino correr antes de estar en Singapur, me refiero.
Quizás sea incorrecto llamarlos chinos, lo correcto sería singapurenses. Pero puedo decirles sin duda que en esta ciudad hay muchos a quienes en Suiza simplemente, pero erróneamente, llamaríamos chinos. Aun así, tienen algunas similitudes en su patrón de comportamiento: les encanta crear fotos y material de video. A veces tengo la sensación de que ven las cosas realmente hermosas primero en la pantalla de su smartphone, antes de darse cuenta de que la verdadera belleza está detrás, además en 3D.
Además de que, lamentablemente, la ciudad está construida de tal manera que es muy ardua para los peatones y el aire acondicionado a veces sopla más fuerte en la acera que lo que haría una brisa de otoño aquí, también había algunas cosas más naturales.
En los Gardens by the Bay, por casualidad me crucé con un colibrí revoloteando entre las flores y en el río Singapur pude observar a un águila pescadora que, literalmente, estaba sacando su almuerzo del agua. En resumen, fueron dos días llenos de experiencias, deportivos e inolvidables en una gran ciudad tropical rica en vegetación.

Respuesta