Publicado: 05.02.2023
Los últimos dos días en San Cristóbal. Ayer por la mañana empezó a llover. Alrededor de la 1:00, pedimos una cerveza en un bar de playa. La mesera explicó que no hay alcohol durante 4 días. ¡Sin alcohol! Nos miramos atónitos. Pensamos que tal vez eran algunos días festivos. Ella tradujo en su teléfono y nos lo mostró. Nos hicimos una sonrisa. El domingo son las elecciones de alcalde, esa es la razón de la prohibición de alcohol. Para que ningún caliente de cabeza, borracho, influya negativamente en las elecciones. Sylvia, la dueña del hostal, nos explicó que antes incluso había una prohibición de tránsito el día de las elecciones. Otros países, otras costumbres. Para nosotros, un Coca-Cola estaba bien también. 🤤
Dado que no había opción de tumbarnos en la playa debido al clima, salimos a dar un paseo. Y una vez más fuimos recompensados. Farina descubrió el ave que aún estaba en nuestra lista de cosas por hacer. Un booby, finalmente.
Día 46
Ayer, caminando a la derecha del pueblo, hoy fuimos una vez más a la izquierda a la playa la lobería con el sendero que sigue hasta un acantilado donde ya habíamos estado. Con la idea de ver boobies en mente. Galápagos dio lo mejor de sí una vez más. Vimos varios boobies y también varias tortugas marinas nadando en el mar.
Una vez más estoy muy agradecido de poder visitar y experimentar estas islas. Son un verdadero paraíso y, debido a su fauna, algo muy especial. Es la convivencia entre el animal y el ser humano lo que solo aquí en el mundo existe de manera única.
Para nosotros era en realidad la alternativa a Machu Picchu, quizás debía ser así, quién sabe si de otro modo habría vivido este sueño alguna vez.