Foilsithe: 13.08.2024
Hoy vamos de Himmelpfort y Fürstensee a Neustrelitz.
46 km. Tengo un poco de respeto y por si acaso me he puesto mis pantalones de ciclismo, me he puesto crema en el trasero y he llenado mi botella de agua con electrolitos.
El paisaje pasa a mi lado. Tan lentamente, que puedo mirarlo realmente con detenimiento.
Deberíamos hacernos más a menudo el regalo del presente. La palabra inglesa “Present” no tiene sin razón estos dos significados.
En este momento tampoco tengo ganas de comer. Después de que bebo un litro de jugo fresco de manzana y pera en una casa parroquial, mi estómago queda completamente despejado.🤪
No falta mucho y habré alcanzado mi objetivo por hoy.
De repente, a mi derecha veo un lago turquesa y cristalino que me invita a nadar. Es el momento perfecto para esta pausa. El agua está agradablemente fresca y le hace bien a mis extremidades también permitirles movimientos diferentes.
Me doy una hora, luego tengo que seguir. Siempre hacia adelante, como en la vida cotidiana. Incluso en vacaciones no debe faltar “un poco” de disciplina.
Neustrelitz, a diferencia de su entorno, no es una ciudad verde. Plazas pavimentadas y, por lo tanto, insoportablemente calurosas durante el día.
Mi alojamiento es la Basiskulturfabrik y Öko-Hotel y está situado en la naturaleza. Aquí se valora mucho la personalidad y en todo hay mucho corazón.💖
Como hoy en la taberna se ha decidido un día de descanso, debo buscar algo por otros lados.
Así que combino lo útil con lo agradable y también inspecciono la ciudad.
Finalmente, llego al puerto y me siento directamente al lado del agua en un acogedor cobertizo de botes para comer.
Quiero escribir algunas postales, pero la calma no dura mucho. El cobertizo de botes se llena y a mi izquierda se sientan dos caballeros, que llaman la atención con bromas sueltas pero, aún así, traviesas.
Seguramente son “berlinenses”, pienso, pero debo haberlo dicho en voz alta y así empezamos a conversar.
Christian es dentista y viene de Neustrelitz, y Heiko es probablemente empresario y de Zehdenick.
Se vuelve divertido y para mí una noche gratis.
Cuando se cuenta el último chiste y antes de convertirme en el tema de conversación de Neustrelitz, me despido.
Mi mamá solía decir: “cuando es lo más bonito, hay que irse.”
Gracias mamá 🙏🏼
Aún así, en este punto debe contarse un chiste:
¿Recuerdas cuando los niños solían hacer timbre y correr?
Hoy, todos trabajan en DHL.
😂