Publicat: 21.11.2019
Los guías turísticos tienen toda la razón:
1. Levantarse temprano. A las 5 en punto me recogió el autobús turístico, recogió a algunos otros turistas en el lugar y nos dirigimos hasta los 4300 metros de altura.
2. Sí, ver los géiseres con propios ojos y escuchar el agua burbujear es realmente espectacular. Después del amanecer - excepto uno - este espectáculo natural desaparece.
Consejo del guía: ¡NO toquen el agua! Se dice que está a 86 grados. Tampoco quería comprobarlo;-)
3. Es realmente necesario el principio de cebolla. ¡Allí arriba hacía un frío helador! No importa, aún quedaba el baño termal en el programa. Uiuiui, primero a cambiarse = frío. Agua caliente = genial. ¡Pero salir de ahí = ¡helado! ¡Nada como volver al autobús caliente!
El programa también incluía un desayuno y donde hay turistas, también hay gaviotas. Realmente no pensé que hubiera gaviotas