Foilsithe: 01.07.2017
Salimos de Copacabana muy temprano – para desagrado de Tom – para llegar a Puno, Perú a tiempo y disfrutar un poco del día.
Así que llegamos a Puno a las 11 de la mañana, hora local (una hora antes que en Bolivia), después de haber tenido una cruzada fronteriza tan relajada como hacía tiempo no teníamos. Cuando se quiere pasar de Bolivia a Perú, no hay que pagar tarifa de salida (de Bolivia a Chile había que pagar 2€).
En Puno lo primero que buscamos fue algo de comer – finalmente de nuevo pizza, horneada en un buen horno de leña.
Después nos dirigimos a buscar un tour a las Islas Flotantes: las islas flotantes o islas de Uros.
Dado que los tours a otras islas pernoctan y nosotros queríamos alojarnos en las islas flotantes, al final reservamos simplemente un alojamiento en lugar de un tour. Esa fue definitivamente la mejor decisión.
Al día siguiente nos recogieron al mediodía con un servicio de transporte y nos llevaron con nuestro equipaje al puerto, donde fuimos recibidos por el dueño de la isla.
Con una pequeña lancha motora nos dirigimos a la isla, que estaba a 20 minutos.
La isla está compuesta en su mayor parte por junco.
Todas las casas están completamente cubiertas de junco, la estructura y las paredes son de madera y el techo tiene un panel de metal, para que sea a prueba de clima.
Vista panorámica de la isla de Uros
Primero tuvimos la oportunidad de relajarnos bajo el sol y mirar a nuestro alrededor. Estábamos bastante fascinados por la tranquilidad. A excepción de un poco de música lejana, estaba simplemente en silencio.
En algún momento hizo tanto calor que preferí cubrirme un poco 😄
En la isla, uno de los aproximadamente 7 habitantes cocinó el almuerzo para nosotros y por 4€ tuvimos un increíble menú de 3 platos.
Entrante
Plato principal - pescado con vegetales (calientes 😍) y papas dulces y saladas 😲😋
Por la tarde, tuvimos la oportunidad de probar la ropa tradicional, lo cual fue muy divertido para nosotros y parecía muy extraño.Qué suerte que esos tiempos ya pasaron - los gorros y los pompones rosas son para las mujeres solteras 🙈👁️
Botellas de agua llenas de agua caliente
Poco después, nos fuimos en una piragua tradicional a cortar juncos. Al igual que en una góndola, nos llevaron en la embarcación.
Restos de juncos cortados que flotan en el agua
Después de que nos mostraron una vez cómo debería verse la cosecha teóricamente, también intentamos hacerlo.
La parte inferior del junco, que está enterrada en la tierra, se puede comer. Se puede hacer 😏
En el camino de regreso, Tom y yo intentamos remar y fracasamos estrepitosamente.
Tom el gondolero - nos giramos más en círculos que en otra cosa 🤓
Diría que lo hice mejor, ya que la cadena de Tom fue en su mayor parte terminada por el señor de la isla.
Luego se acabó nuestro tiempo y nos llevaron de regreso a Puno, donde fuimos a la terminal de autobuses para continuar hacia Arequipa.
➡ Colca Canyon; Cusco