Foilsithe: 24.02.2017
7:45, ya están aquí, ¡vamos! Nos recoge un Buick, no sé cuán viejo es, falta una ventana en la parte trasera derecha, ningún indicador en el auto funciona, como dije, está lloviendo a cántaros y solo un limpiaparabrisas funciona. Pero el tipo parece tenerlo bajo control, estamos tres adelante, de lo contrario la persona en la parte trasera derecha se mojará y cuando empieza a llover más fuerte, se le ofrece a Max un saco de reemplazo por su ventana faltante. Me gusta.
Al final, Malte también se moja en el asiento del pasajero y mis pies en el medio adelante también, ya que está lloviendo por la ventana delantera.
Nuestra primera parada es una especie de área de descanso, porque necesitamos desayunar. Poco espectacular. Así que seguimos adelante...
Una vez más 'oh no, no funciona', el auto no arranca, lo que significa que tenemos que empujar el coche, entre las risas de las chicas cubanas en el auto al lado. No hay forma, pero de alguna manera consigue que el auto funcione y continuamos. 🤗
Veñales fue definitivamente muy chido, visitamos una granja de tabaco y nos mostraron cómo se enrolla un cigarro, luego fuimos a una especie de cueva con estalactitas, incluida una pequeña excursión en bote, poco espectacular, aunque la vista de las montañas en nuestra primera parada es realmente impresionante!
En el camino hacia Las Terasas, pasamos por un grupo de jóvenes cubanos que están emocionados alrededor de una pelea de gallos, echamos un vistazo a todo, pero luego seguimos adelante para escapar de esta extraña tradición.
Nuestro conductor, que hace una buena impresión, según él mismo, ha estado trabajando toda la noche y ahora lucha visiblemente con su cansancio. Lógicamente, tenemos una sensación algo incómoda y, por tanto, vigilamos un poco al caballero. Por eso paramos en la siguiente oportunidad para reabastecernos. Una pequeña familia nos brinda lo que probablemente es el mejor trozo de carne que he comido, junto con arroz, frijoles, etc. ¡Realmente bueno!
Después de la comida, exploramos el jardín, además de todos los animales que se mantienen aquí, crecen plátanos, mangos y cocos, de estos últimos recogemos del árbol y los probamos, también no sabía que me gustaban.
Ahora seguimos hacia Las Terrasas y hacia la tirolesa, pero al llegar nos enteramos de que llegamos 20 minutos tarde y esta pequeña aventura se cancela para nosotros, una pena, pero mejor para el bolsillo. Así que ahora regresamos a La Habana, donde creo que vamos hacia la ciudad... lo que sucede allí, seguro lo saben.
Conocemos a un francés que habla bien alemán y a tres cubanos, entre ellos una pareja, que nos invita a una fiesta para el día siguiente. No estamos muy seguros de si deberíamos hacerlo, porque aquí realmente es muy molesto que todos solo quieran tu dinero y nunca puedes confiar. Preferiría simplemente pagar por que eso se detenga y conocer a gente buena o simplemente ser dejado en paz.
De cualquier manera, está claro que ambos estamos listos para la playa y por eso mañana iremos hacia Cienfuegos o Trinidad para levantar un poco las piernas.
Si te preguntas por qué estoy escribiendo un texto tan detallado: tuvimos que conducir un total de 380 km hoy, lo que significa 8 horas en auto en Cuba.