Foilsithe: 20.06.2023
Desde Dagebüll en el tren regional a Elmshorn. Hicimos transbordo y desde allí continuamos hacia Hamburgo. En Hamburgo compramos los boletos para el viaje en tren a Bremen en la máquina expendedora. Aprovechamos la casi hora de espera para comer algo y comprar agua. La vía del tren está llena de gente. ¡Rumbo a Bremen!
Tenemos grandes problemas para encontrar de manera espontánea un alojamiento que sea asequible para nosotros o encontrar uno en absoluto. Además, aquí en la costa del Mar del Norte, la recepción de internet es muy, muy mala, lo que hace que sea casi imposible para nosotros utilizar el tiempo para ello mientras estamos en movimiento.
Desde ayer estamos en Bremen y hemos decidido quedarnos aquí dos noches para planificar y reservar un poco nuestra viaje con anticipación, lo cual consume increíblemente mucho tiempo.🤖
No obstante, disfrutamos de una cervecita en el 'Schwarzen Hermann', un ícono de la cultura de bares de Bremen desde los años 70, y luego fuimos al italiano 'Al Papagallo' - ¡excelente!🍻
Hoy fui a la lavandería y Aad ha intentado organizar nuestro viaje, por supuesto después de una previa consulta y, naturalmente, dentro de lo posible - no es una tarea fácil - hay tantos obstáculos. Pero ya tenemos hechos los planes para los próximos días. Eso aún no lo revelamos. A domani👋
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Desde Dagebüll en el tren regional a Elmshorn, de ahí a Hamburgo, en Hamburgo sacamos los boletos de la máquina expendedora para Bremen, comimos una currywurst y un bocadillo, y nos abrimos paso a través de la multitud en el andén.
¡Bremen allá vamos!
Realmente estamos teniendo muchas dificultades para encontrar un lugar donde dormir que sea asequible, si es que encontramos uno. ¡El turismo aquí está muy desarrollado y, por lo tanto, todo está reservado completamente hasta agosto!
El internet aquí en el campo y en el tren generalmente está ausente o apenas disponible, por lo que reservar durante el viaje, etc. no es posible, lo que consume mucho tiempo y nervios...
Por eso decidimos quedarnos dos días en Bremen para poner las cosas en orden y organizar los lugares para dormir con unos días/semana de antelación.
Además, necesitábamos urgentemente lavar la ropa y por eso Alda va a la lavandería y yo me pongo a trabajar con el teléfono.
Por supuesto, no nos privamos de disfrutar de una buena cerveza en el Schwarzen Hermann, y de una comida excelente en Papagallo, ¡todo bajo un clima maravilloso!