Foilsithe: 08.07.2024
El viaje a la cordillera del Atlas estuvo inicialmente marcado por la aridez, la sequedad y el calor. Pero con cada metro de altitud que ascendíamos, la temperatura se volvían más agradable y el paisaje un poco más verde. Después de un largo trayecto, finalmente llegamos al lugar para nuestro campamento, una vez más alejado de la civilización. Por la noche disfrutamos de un delicioso raclette y nos fuimos a la cama temprano y agotados.