El despertador suena a las 6 de la mañana. Sé que es muy temprano para las vacaciones. Hay varias razones para esto. Por un lado, no siempre es fácil encontrar un aparcamiento con la gran autocaravana. Luego no nos gustan las multitudes de personas que vienen a la 'hora normal'. Así que aceptamos levantarnos temprano. Necesitamos media hora para llegar a la entrada del parque. Hoy también tenemos un boleto, que es aún más especial. Porque aquí solo se puede entrar con boleto. En el resto del parque se puede atravesar sin boleto antes de las 9 y después de las 14 horas sin cita.
Podemos acceder a esta parte del parque de 8 a 9. Estamos demasiado temprano y por eso tenemos que esperar media hora. Puntualmente a las 8 pasamos por la puerta y debemos aparcar en el aparcamiento Park and Ride y usar el servicio de transporte. Justo antes de las 9 llegamos al punto de partida de nuestra caminata. El camino está bien pavimentado y va constantemente en subida hacia los 3 lagos. La distancia es de 3 kilómetros con 184 metros de desnivel. Después de cada kilómetro, los lagos aparecen en su majestuosa belleza. Especialmente impresionante es el último lago, el Emerald Lake. Aquí termina el camino y disfrutamos de nuestro segundo desayuno. Ahora es el momento de regresar. Justo al final, las multitudes de gente vienen hacia nosotros. Justo en el punto de partida se encuentra el Bear Lake, que lo rodeamos rápidamente. Nuestros fuerzas aún son suficientes y así caminamos hasta la cascada Alberta. Siempre es impresionante el poder que tiene el agua. Después caminamos constantemente hacia abajo hacia el Spragues Lake. El camino está desierto y nos lleva a través de bosques, praderas y junto a cuerpos de agua. Al llegar al Lago Spragues, estamos bastante exhaustos. Hemos caminado un total de 17 kilómetros. Para los últimos metros del lago al aparcamiento usamos el autobús lanzadera, porque ya no podemos recorrer 2 kilómetros más. Exhaustos, salimos del parque y estamos orgullosos de nuestro desempeño. Los niños se han portado muy bien, aunque David cuenta novelas enteras. Es divertido, porque habla sin parar, pero tiene una actitud muy positiva.
Como la leche se nos ha echado a perder esta mañana, tenemos que hacer una parada rápida en el supermercado y luego estamos de vuelta en el mismo camping que ayer hacia las 17 horas. Pudimos comprar leña a buen precio y así nos abriga una fogata.