Foilsithe: 15.07.2016
Hoy hemos visitado Bodie Town, un asentamiento minero de oro abandonado. Como por arte de magia, la ciudad parece que sus habitantes acaban de irse, cuando en realidad no vive nadie desde la década de 1930. Debido a la baja humedad del aire, la ciudad todavía se conserva relativamente bien. Un lugar realmente espeluznante. Al mirar dentro de las diferentes casas, se pueden ver aún los muebles de los antiguos residentes. Nos sentimos como si hubiéramos sido transportados a una película del Viejo Oeste :-)
Después fuimos al Lago Mono. Este lago es especialmente salino y alcalino al mismo tiempo. Por ello, las orillas son completamente blancas. Sin embargo, este ecosistema especial ofrece un hogar para muchas especies de aves para anidar. Así que no es muy invitante para nadar :D ¡pero es especialmente hermoso de ver!