Hoy viajamos a la isla Isabela. Salimos a las siete y media de la mañana desde Santa Cruz en el ferry. El trayecto dura dos horas y, debido al oleaje, no es del todo agradable. Al llegar, hacemos el check-in en el albergue y luego alquilamos una bicicleta para el día. Con ella, recorremos un camino de 5 kilómetros hacia la Wall of Tears, una muralla construida con piedras volcánicas de una antigua colonia penal. A lo largo del camino, hay algunos lugares para explorar, incluyendo un mirador. Pasando la muralla, subimos una colina desde la cual tenemos una buena vista de la isla. El regreso en bicicleta es relativamente rápido, ya que vamos en bajada.