Publicat: 12.04.2017
Después de nuestra excursión de un día a Tikal, decidimos salir al día siguiente para tomar el autobús a las 8 de la mañana hacia Lanquin con un viaje de 8 horas.
Lo que no planeamos fue salir hasta las 5:30 de la mañana y dormir demasiado hasta las 8:10, así que lógicamente nuestra salida de autobús también se vio afectada.
En nuestra panique por perder un día, quedándonos atrapados en Flores, pregunté si no había otra posibilidad de llegar a Lanquin mientras Sina recogía su ropa.. que también casi olvidamos.
Por suerte conseguimos los últimos 2 asientos en un viaje a las 9 de la mañana.
No estamos hablando de asientos normales aquí. Más bien de los asientos que ponen entre los normales que quizás solo se usan en caso de emergencia durante un viaje de 3 minutos.
No hacen falta palabras.
Pero no nos importaba, solo queríamos llegar a Lanquin ese día y no al siguiente.
Para resumir: nos sentamos en un transporte a las 9 de la mañana (con personas que esperaron 1 hora por nosotros, como descubrimos más tarde) en los peores asientos por 40 QZ más, sin tener comida preparada para el camino y solo 2 horas de sueño en nuestro sistema, pero con un viaje de 8 horas por delante.
Cansados, pero no demasiado para tomar una foto con esta hermosa vista.
Cuando hicimos una parada en Coban, donde el conductor del autobús preguntó a cada uno en qué hostal se estaban hospedando. Le explicamos que aún no teníamos reservas..
Una vez más, tuvimos la suerte suficiente de que ofreció su ayuda para llamar a un hostal (Oasis) para hacer una reserva. Un saludo al mejor conductor de transporte... si alguna vez lee esto.
Al día siguiente hicimos un viaje a Semuc Champey, que es un monumento natural en el departamento de Alta Verapaz. Fue aproximadamente un viaje de 1 hora en un remolque.
El transporte nos costó 50QZ y la entrada también. Pero también puedes reservarlo como un tour. - Entonces tendrías el rafting y la cueva incluidos.-
Nos alegramos de no hacerlo porque de esta manera siempre estuvimos en lugares sin otros turistas.
Semuc Champey definitivamente merece una visita y mientras no esté sobrecargado de turistas, aún más. Si tienes suerte, verás algunos monos sobre ti en las montañas.
Hasta nuestra próxima parada en el hermoso Lago de Atitlán.