Publicat: 18.05.2020
Antes de comenzar mi última semana, se celebró una ceremonia del café en Addis Guzo (el cumpleaños de la Virgen María). Con el café se sirvieron Annebabero - 'Pizza de Injera', Hambesha - pan tradicional y garbanzos y cebada cocidos como aperitivo. El sábado fue el día festivo, normalmente la familia, vecinos y amigos se reúnen en los jardines y se celebra al aire libre. Este año, dependiendo de la familia, se hizo un poco de adaptación (medidas de protección). Es especial porque se celebra al aire libre con toda la familia y porque se festeja algo bonito, el día festivo favorito de muchos etíopes y etíopes.
El domingo se operó a Dinkenish - una perra callejera que vive frente al complejo de Addis Guzo y que es la madre del perro guardián Marley. Tenía una infección uterina (no es sorpresa tras varios embarazos). Se tuvo que extirpar el útero. La operación se realizó en la sala de fisioterapia, que actualmente no se utiliza. Para mí fue la primera operación de un animal que he visto. Emocionante y muy desagradable... A la perra le va bien y nunca podrá ser madre de nuevo, lo que probablemente la habría llevado a la muerte.
Mi última semana en Addis Guzo fue genial. Hice muchos trabajos diversos como 'pimpear' sillas de ruedas, construir armazones de madera, organizar el almacén, etc. También realicé una sesión de fotos, retratos de todos los empleados y algunas fotos grupales. Hice un retrato con y uno sin mascarilla (hermosas mascarillas de tela reutilizables del equipo de costura de Addis Guzo).
Para mi despedida hubo una ceremonia de café con pastel. Fue una despedida conmovedora y tuve que prometer volver en algún momento. Definitivamente diré adiós en aproximadamente 3 semanas, antes de irme (esperemos) en el vuelo. Actualmente, los vuelos siguen siendo horriblemente caros...
He añadido a las imágenes una casita de hojalata. Hay miles de ellas aquí en Addis. Creas o no, es una casa. Ya me he acostumbrado mucho a este tipo de imágenes. A veces paso por las calles y todo me parece absolutamente normal. Luego recuerdo mis primeros días en Addis, estaba asombrado por los andamios de eucalipto en los rascacielos, que ya no me llaman la atención. A las personas desnudas en la calle y diversas circunstancias de vida precarias. Todo esto y mucho más se ha convertido en una costumbre para mí. ¿Cómo será mi regreso a Suiza...?