Publicat: 27.09.2020
Después de que nuestra visita se haya ido, queremos regresar a Atenas por dos días para reflexionar tranquilamente sobre cómo continuar. Sin embargo, sentimos una ligera fatiga de viaje después de estos intensos días en seis llenos de hermosas impresiones. Así, pasear por calles que ahora nos son familiares en esta maravillosa ciudad y relajarnos en nuestra enorme terraza con vista a la Acrópolis se siente un poco como estar en casa, y de esos dos días se convierten primero en cuatro y luego en ocho.
Después de una semana de 'vacaciones' con los abuelos, también es hora de un poco de educación en casa y esta estructura casi cotidiana nos hace bien a todos, disfrutamos dejándonos llevar un poco en las tardes sin mucho programa: a veces a la playa, a veces al museo: en el Museo de la Acrópolis admiramos las estatuas y frescos de 3000 años de antigüedad que representan la lucha entre Atenea y Poseidón, y en el Museo de Arte Moderno obtenemos impresiones de las luchas artísticas contemporáneas con luchas actuales. Por cierto, entre toda el arte antiguo y moderno, los niños están más interesados en los baños de los museos, que son tan modernos en el Museo de la Acrópolis que deben ser mencionados aquí.
Después de ocho días, nuestras baterías de exploración están recargadas y cuando el sábado continuamos, estamos nuevamente en modo de viaje y esperamos con ansias dos días en Meteora.