Publicat: 09.07.2020
Miércoles, 8 de JULIO de 2020
Hoy se pone emocionante nuevamente. ¿Puedo ingresar a Noruega?
Soy de los primeros pasajeros en pasar por el control de fronteras. Pero no llego tan lejos. Me piden que me detenga a un lado. Ahora un joven agente de fronteras se hace cargo de mí. Lee las actuales regulaciones de entrada casi diez veces. Tal vez pueda encontrar alguna legitimación para mi entrada como ciudadano alemán. Llama varias veces a sus superiores y a la mujer con quien tengo una cita para cuidar casas en Noruega. Después de tres horas, me informa que lamentablemente tengo que regresar hoy mismo a Dinamarca en barco. Sin embargo, se encargarán de que no tenga que pagar nada por el viaje de regreso. Quiero expresar un gran elogio para el joven agente de fronteras y su colega joven. Me trataron con mucha amabilidad y se esforzaron mucho por facilitarme la entrada.
Lo que no debe ser, no debe ser. 😇 A las 12:00 del mediodía, vuelvo a bordo para reanudar el viaje de nueve horas y media.
Ahora es tiempo de hacer nuevos planes. Primero tengo que pensar en dónde puedo pasar la noche. Encuentro a una amable mujer en Couchsurfing, quien rápidamente me da una confirmación. Su casa está a ocho km del puerto. Creo que puedo hacerlo.
Deben convencer un poco al agente de fronteras danés para que me deje pasar. Pero ahora estoy de nuevo en Dinamarca y me dirijo hacia Caja, la amable mujer que me ofreció un sofá.
Poco antes de las 23:00, ya casi está oscuro, llego a su hogar. Me sorprende no poco que ella aloje a nueve huéspedes más en su casa. La mayor parte de ellos ha estado aquí durante mucho tiempo. Son todos jóvenes de diferentes países lejanos como Argentina y Japón. Me parece maravilloso y me siento increíblemente bien aquí. Ahora todo tiene sentido para mí. Tener que regresar me llevó a este lugar tan hermoso.