Publicat: 24.07.2019
4 de julio de 2019
Nos despertamos tarde... cuando nos despertamos, está lloviendo. En general, no me siento muy animado. Y de alguna manera, todo parece irreal. Solo recuerdo vagamente que la última vez fue igual. Estábamos en Sídney y tuvimos que levantarnos para ver algo de la ciudad. Hoy no es así. No recuerdo bien. Nos levantamos, comemos algo, aunque no tenemos hambre (ya la tuvimos durante la noche) y exploramos un poco la zona. Llevamos la ropa sucia de Daniel y al menos tenemos una tarea buscando una lavadora. Más tarde descubrimos un parque infantil con un juego electrónico realmente divertido. Jugamos un rato, nos movemos y realmente nos divertimos.
Daniel llega a las 17 horas en un taxi, con todo su equipaje y hablamos durante una hora sobre la situación actual, lo que me hace sentir bien. Después decidimos espontáneamente ir en taxi al pueblo, al restaurante donde trabaja Daniel. Es un restaurante realmente bonito, muy elegante y me gusta mucho. El menú es bastante atractivo, aunque no del todo barato, como todo aquí en Australia. La camarera es alemana y se dirige a nosotros... Daniel paga por nosotros y recibe un 50% de descuento, lo que lo hace muy orgulloso y a mí también.
Tomamos un taxi de regreso a nuestro alojamiento y nos vamos a dormir. Esta noche es un poco mejor que la anterior, sin embargo, Mika y yo estamos despiertos durante mucho tiempo. A Mika le da miedo, ya que está lloviendo y hay tormentas fuertes. Aunque sé que no puede pasar nada, tampoco me parece muy genial....😡