Publicat: 28.06.2020
2 de julio de 2018
Esta mañana es más relajada que en los últimos días. Aunque no podemos dormir hasta tarde, hoy tampoco tenemos que levantarnos a las 5 de la mañana. Nos despertamos alrededor de las 7:30 con el graznido de los bandos de cacatúas. Increíble el ruido que pueden hacer. Tengo la sensación de estar durmiendo en una gran aviario :-)
Mientras voy al exterior para mi aseo matutino y quiero cerrar la puerta del vehículo recreativo (por cierto, ya no está lloviendo), sucede:
¡el encuentro aterrador con la primera gran criatura arrastrándose!!!
Afuera de la puerta del vehículo hay una enorme araña negra que, al intentar cerrar la puerta, intenta entrar en el interior del vehículo a una velocidad vertiginosa. Pero ¡soy más rápido! ¡Sí!
Espontáneamente cierro la puerta, doy un salto hacia atrás y grito. Tengo una fobia total a las arañas.... ¡Ahhhhhhhhhhh! Con impotencia, tengo que ver cómo la criatura trata de hundirse entre la mosquitera y la puerta.
Grito a mi esposo que abra la puerta con fuerza, para que la criatura vuele lejos (esa es la teoría). Conformista, mi esposo reacciona y empuja a la araña hábilmente hacia el exterior. Ella queda sobre la losa (¡enooorme - al menos así lo considero!), desde donde mi esposo la catapulta con la escoba a aproximadamente 3 metros al otro lado de la calle.
¡Uf - ahora estoy despierta!
Ahora miro atentamente dónde piso mientras camino hacia el baño. También allí todo se inspecciona de cerca antes de que me siente frente al lavabo o busque el baño. Parece que con la humedad, las criaturas se sienten atraídas por lo seco. Pero tuve suerte - no hay araña a la vista. Uff....
También en el camino de regreso al vehículo recreativo miro la puerta muy de cerca antes de tocarla. No queremos arriesgarnos a otro encuentro.
Después del desayuno continuamos hacia el norte. El clima ha mejorado un poco, ya no llueve, pero la costa está nublada y no hay sol visible. Así que hoy el viaje a Whitsundays tampoco se habría convertido en una aventura veraniega... ¿qué se le va a hacer, vamos adelante!
Salimos hacia Townsville. Magnetic Island también fue objeto del rotulador rojo, por lo que solo paramos en Townsville para almorzar.
Al mediodía llegamos a la ciudad sin complicaciones y conseguimos un lugar para estacionar cerca de la playa.
El clima sigue estando muy nublado, sobre el mar es aún más oscuro. Así que Magnetic Island también no habría sido tan genial hoy...
En la playa almorzamos en el restaurante