Publicat: 16.08.2017
El viaje de regreso de Schengen a Luxemburgo fue sin contratiempos. Muchas personas serviciales nos apoyaron durante el trayecto. Finalmente hemos llegado a nuestra albergue juvenil. Se han recorrido muchas distancias a pie. Después de que se sorteó la asignación de habitaciones entre los chicos, pudimos ocupar los cuartos. Lo único que falta para relajarnos es la piscina. Para la cena decidimos comer en la albergue. Hay sopa de zanahoria y ensalada. De plato principal hay salmón y papas fritas. También habrá un postre. Queremos terminar la velada de manera tranquila en el salón.