Foilsithe: 18.08.2017
Después de largas preparaciones, temprano en la mañana partimos de la tranquila Oberzell hacia el gran mundo. Lamentablemente, en el camino hacia la salida, se nos presentaron algunos obstáculos. Sin embargo, Jonas pudo viajar en un TGV por primera vez, el cual, gracias a su retraso, nos permitió disfrutar de una estancia de una hora en la hermosa Mannheim. Después de una gran tormenta en el aeropuerto de Frankfurt, finalmente nos dirigimos hacia Brasil, aunque con retraso. Tras nuestro largo día de viaje, caímos relajados en nuestra cama en Recife.