Publicat: 17.01.2017
Una curiosidad era un baño público. La puerta solo se podía abrir eléctricamente con un botón. Dentro había un contenedor especial para jeringas y, tan pronto como se presionaba el mecanismo de cierre controlado electrónicamente, sonaba desde los altavoces una increíblemente relajante pieza musical. Podías ponerte un